Cristina y Vicente tienen un pequeño restaurante en el pueblo donde vivo. Hace unos once años que se decidieron a abrir su negocio y, por ahora, no se quejan demasiado, aunque, en los dos últimos años, han sentido la tenaza agobiante de la crisis.
Uno de sus servicios esenciales es ofrecer, a un precio sensato, un menú diario. La mayor parte de los clientes son, entre semana, trabajadores de la construcción. Digo son, y tendría que decir eran, porque en este pueblo, como en otros muchos, el desparrame inmobiliario se acabó y, por consiguiente, la creación de puestos de trabajo ha dado paso al desempleo y a la falta de clientes.
El caso es que los miércoles toca cocido y hoy es miércoles. Así que para celebrar que este año no acabaré siendo millonario porque no me ha tocado la lotería, me he acercado hasta su restaurante para comer una buena sopa y después los correspondientes garbanzos con sus aditamentos. No se le da mal a Vicente la cocina y el cocido está bastante bien, aunque en el de hoy no había gallina. Será por la crisis.
Como cualquier persona medianamente civilizada me gusta acompañar la comida con vino. Evidentemente no puedo permitirme el lujo de pedir cada día un caldo de cierta prestancia, que suelo elegir entre un Rioja o un Ribera aunque, si estoy en una zona determinada de nuestro excelso país, me puedo inclinar por un vino del territorio en cuestión.
No hago ascos a los caldos hispanos salvo muy raras excepciones (que omitiré), aunque también caen de vez en cuando franceses y lusitanos.
Sin embargo, en ocasiones como las de hoy, me decanto (y nunca mejor dicho) por el vino del menú, siempre y cuando sea medianamente aceptable y no un brebaje que supere lo tolerable incluso para un paladar no muy exigente. Prefiero pagar un poco más a estropear la comida.
La sorpresa ha llegado cuando Vicente me ha traído la botella del tintorro en cuestión y he visto la etiqueta: Marqués del Tirón. Por Júpiter que me ha llamado la atención el nombre. Un marqués que se dedica a dar tirones acuciado por las deudas, o un marqués con mucho tirón; algo, en todo caso, extraordinario.
Pero, no han acabado ahí mis sorpresas, pues al seguir leyendo, como tengo por costumbre, los datos sobre el vino en cuestión, destinado a acompañarme durante la comida, he visto que es de Coles (Ourense), la zona de nuestra amiga María Jesús. Curiosa coincidencia o, ¿es acaso una señal que habrá que interpretar? Emocionante otrosí.
¿Quizás sea entonces que un marques decepcionado y anónimo se tiró al pozo de la foto de los relatos, despechado por no haber logrado enamorar a nuestra amiga? Y de ahí lo del tirón. Quién sabe.
Rápidamente he escanciado un poco de ese tinto, de color más bien claro, pues se trata de un sencillo vino de mesa joven y, bueno, se ha dejado beber. Y la primera copa ha su salud (de nuestra amiga) ha sido dedicada.
Después he comprobado que en aquella tierra de Coles hay varias bodegas que se dedican a la venta de todo tipo de vinos, entre ellos el ya famoso Mencia que de vez en cuando me suministran mis parientes (consortes) galaicos, junto con queso de Chantada, empanada, chorizos y pimientos de Herbón para alimentar a un regimiento y, por supuesto, todo casero.
En fin, que el vino de Coles ha llegado a este pequeño pueblo de la Comunidad de Madrid. Que sea para bien y para disfrute del personal. Ya me encargaré de ello.
Aprovecho la ocasión para desearos a todas y todos unas felices fiestas:
Bones festes, Zorionak. Boas Festas.
Tampoco me ha tocado, sólo el reintegro..Mientras la salud acompañe ;)Brindemos pues con este vino(u otro caldo que me guardaré muy bien de mencionar, no quiero que se te indigeste el Cocido)por este año que saca el hocico...
ResponderEliminarEt desitjo tot el millor per 2011! El mateix per María Jesús i els teus visitants!
Una forta abraçada!
Qué manera más bonita de relatar una comida. Entre el cocido y el descubrimiento del vino, he pasado un rato estupendo. Además de felicitarnos y mandarte a su vez también yo otra felicitación festiva, lo que deberías hacer es proponer una comida bloguera en semejante y maravilloso sitio del buen comer. Quizás en 2011, no?
ResponderEliminarBesos
Martine lo bueno es tener siempre algún vino para brindar aunque no nos haya tocado la lotería.
ResponderEliminarAunque a mí si me ha tocado otra lotería.
besos
Me parece un estupenda idea lo de organizar una comida en el 2011.
ResponderEliminarLo que pasa es que os pilla a todo a trasmano mi pueblo. Pero bueno, ya veremos.
besos
Txema yo también soy de Coles.
ResponderEliminarNo hablas si te gustó el tintorro, ¿qué pasa que no te atreves a decir que es muy malo?.
Conozco las bodegas del marqués del Tirón y me imagino que le pusieron el nombre por el "tirón" que te da cuando pruebas el vino. Te puedo asegurar que aquí tenemos mejores vinos, hay una zona que está dentro de la denominación de origen "Ribeira Sacra" y es bastante buen vino, nada parecido al marqués de Tirón.
Sobre esas bodegas hace tiempo me contaron una anécdota, si vas allí y le dices que quieres un "Rioja" esperas un ratito y te traen un "rioja", si quieres un "Ribera del Duero", esperas y te venden un "ribera del duero", y así sucesivamente, la bodega te sirve el vino que tu quieras, no sé si usan polvos mágicos o algo por el estilo, esos vinos, dicen que tienen una virtud, no se suben a la cabeza.
Bicos
Jajaja. No Dilaida, sencillamente es un vino de mesa y como tal hay que considerarlo. Como comprenderás Vicente que cobra ocho euros por menú e incluye el vino y postre no me va a poner un Rioja. No quiero que se arruine.
ResponderEliminarPor cierto no sabía que eres de Coles. Pues nada considerate también homenajeada con esta entradilla.
Hombre, evidentemente, no es un vino para perder la cabeza, aunque si se bebe mucho puede llegar a suceder.
Pero, no sabía yo que en la zona de Coles hubiera tanta bodega. Lo de la Ribeira Sacra últimamente se está poniendo de moda.
Aquí en Madrid hay una especie de fiebre sacraril. Nada bueno puede resultar de eso.
bicos
Txema en realidad, bodegas en Coles sólo hay una con buen vino, es bodegas "Bodega Lagariños"; la del "marqués de Tirón" más bien es un almacén porque no tienen viñedos propios, no sé si compran las uvas en Galicia o en otras comunidades.
ResponderEliminarLa "Ribeira Sacra" comprende los viñedos que están en los concellos del sur de la provincia del Lugo y norte de Ourense, es una zona muy amplia y Chantada también está dentro de la zona, lo mismo que el Cañon del Sil, es decir parte de las riberas del Sil y el Miño.
Coles no pertenece a esa zona en teoría, pero en la práctica la parte del concello de Coles que está a orillas del Miño tiene viñedos con las mismas características que tienen los que están en el concello limítrofe (A Peroxa) y que son de la Ribeira Sacra.
Dilaida, gracias por tu magnífica información.
ResponderEliminarPrecisamente tengo un viaje pendiente a la Riberira Sacra. Allí, si mi informamción no es mala, hay un embarcadero en Os Peares para hacer un recorrido en barco por el cañón que me comentas. He visto fotos y parece impresionante.
En cuanto pueda escaparme tres días y tenga un poco de tiempo allí estaré.
saludos.
En primer lugar, mi agradecimiento por abrir de nuevo este espacio que tenía Vd. últimamente lleno de polvo.
ResponderEliminarMarqués del Tirón, jajajaja. Humor no les falta a los paisanos de Maria Jesus... Esa versión "democrática" del aristócrata de los vinos españoles no está nada mal y además rima, jajaja.
Y sí, la Mencía ha pasado del Bierzo a la zona de Ourense y se están haciendo cosas realmente buenas.
Me ha dado Vd. una envidia con lo del cocido... Que me quedé con ganas el otro día, vamos...
Un abrazo grane, Txema
Muchas gracias mi querida amiga. Ya habrá tiempo de degustar un buen cocido.
ResponderEliminarBesos
Si vienes a la Ribeira Sacra, "meu amigo", un día duermes en el Pazo de Soutullo, a mi cuenta, ya que te has bebido el vino a mi salud.
ResponderEliminarDilaida y yo somos vecinas (tres kilómetros por medio), aunque ella entiende de bodegas más que yo (tiene un buen asesor).
Hermosa entrada, que te agradezco.
Pero qué sibarita eres, Txema!!! Yo el vino, ni catarlo, con el olor ya me pongo contenta, jajajajaj!
ResponderEliminarSi, tengo muchas ganas de conocer la Ribera Sacra. A ver si para entonces tengo acabado el relato que empecé con las fotos y que no pude acabar en su día.
ResponderEliminarsaludos y gracias por la invitación.
Ay Menda. No sabes lo que te pierdes.
ResponderEliminarBueno, aprovecho para felicitarte las fiestas navideñas.
Besos
Txema da gusto leer tus escritos, sobre todo cuando hablas de comida.
ResponderEliminarEspero que pases unas muy felices fiestas y que escribas pronto, de nuevo, en este rincón tan magnífico que tienes.
Saludos progresistas de Madrid.
Gracias Marcos, cuenta con ello, sobre todo estos días que se zampa de lo lindo. jaja.
ResponderEliminarun abrazo
Hola Txema, paso a desearte una Feliz navidad y un próspero año nuevo!!
ResponderEliminarUn besoo muy fuerte de tu niña gallega
sara
Felices fiestas, un placer leer esta entrada tan alimenticia. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarBueno o malo disfrutaste de tu menú de 8 euros, ya no puedes pedir más, la verdad es que a mí el vino no me gusta mucho,ni el cava, pero hoy día de Navidad brindaré por tí, te deseo que pases un feliz día. Una abraçada.
ResponderEliminarSara, Emejota y Geni, también brindaré por vosotras, aunque von un vino bastante mejor, como os mereceís.
ResponderEliminarBesos
Nunca comas un cocido con agua. Es malo para la digestión.
ResponderEliminarUN buen menú del día se mide por el vino, precisamente.
Felices fiestas.
Ya hay un atractivo más para visitar la Ribera Sacra: el probar sus vinos, catarlos y elegir el mejor. Bella entrada, amigo. Feliz año.
ResponderEliminarAmigo Ojeda, comer con agua es malo en general. El vino es esencial para acompañar el menú pero dadas las circunstancias hemos rebajado nuestras exigencias.
ResponderEliminarsaludos
Aro, el vino es siempre un buen reclamo para ir a cualquier sitio.
ResponderEliminarsaludos