Foto: Txema
Entre tú y yo
Sobran las palabras.
Entre tú y yo
Sobran las miradas.
Porque tú y yo
Ya no somos dos.
Y tú hablas por mi
Como yo miro por ti.
Y cuando me amas
amas por los dos
Lo mismo que te amo yo.
Tus ojos son mis ojos,
Mi boca es tu boca
Tus besos son los míos.
Entre tú y yo
Solo una boca, solo unos ojos
Sólo una amor, sólo una vida.
Eso que hoy nos cuentas, es el VERDADERO AMOR; sospecho que, además, es un amor maduro.
ResponderEliminarFeliz fin de semana.
La búsqueda de la unidad, esa constante amorosa. Y fíjate, a lo más que llegamos es justo cuando el enamoramiento va de baja y nace el verdadero amor.
ResponderEliminarUn poema que habla de amor, estupendo.
ResponderEliminarBicos
El amor nos hace sentirnos uno con el amado, porque se produce tal fusión con él que basta con un gesto para que todo esté dicho.
ResponderEliminarNo obstante, creo que lo más hermoso del amor es la unidad en la diversidad. Me explico: dos seres distintos, independientes y autosuficientes, que conservan sus formas de ser, gustos y aficiones distintas, convergen en algo inexplicable y que les sobrepasa. Es una gran explosión de generosidad.
Jamás me he podido responder por qué amo a quien amo, porque somos bien distintos y, al compás, muy similares. Al final, desisto de hallar respuesta, pues me basta con que exista esa persona y celebro cada día su existencia, tan necesaria para mí.
Un abrazo bien fuerte, querido poeta.
Me gusta.
ResponderEliminarMercedes es verdad que la madurez hace que se tenga una visión distinta del amor. Quizá se pierden algunas otras cosas, pero la serenidad de los años lo mejoran casi todo.
ResponderEliminarBesos
East, te digo un poco lo mismo que a Mercedes. Se produce una metamorfosis que creo que tiene bastantes cosas positivas, porque vemos las cosas (y a la persona) con más claridad.
Un abrazo.
Dilaida, creo que los poemas de amor siempre cuantan con más benevolencia por parte de quienes los leen.
ResponderEliminarBicos
Isabel evidentemente estoy de acuerdo contigo. Cada persona debe manener su propio espacio. Pero hay una parte que tiene, en mi opinión, que convertitrse en una sola. De lo contrario el amor, que no significa sumisión, no es perfecto. Para ya te digo que esto es una opinión muy personal.
Besicos
María Jesús, me alegro de que te gusta. Gracias
Saludos
Gracias por tus palabras, Txema. Gracias por rescatarnos de la realidad.
ResponderEliminarMaría y Nati, muchas gracias por vuestros comentarios. Y ojalá que sirvan para algo mis modestos poemas.
ResponderEliminarSaludos
Esa rosa es preciosa y en ella se pueden fundir todos los besos de los amantes.
ResponderEliminarPues si Myr, la rosa es de una maceta que tengo por aquí y también me parece que es muy bonita. Y, sobre todo, una superviviente. Gracias por tu comentario.
ResponderEliminarBesos
Poco espacio debe mediar siempre entre un tú y un yo.
ResponderEliminarPedro, el menor espacio posible.
ResponderEliminarSaludos
Además de consolidarte como el gran poeta de la blogosfera, debo decirte que creo más en la diversidad amorosa que en la fusión. El amor entre distintos siempre pareciome muy atractivo... será porque para mí nunca sobran las palabras. Las necesito.
ResponderEliminarPor lo demás, precioso poema
Un beso
Jajaja. ¡Ay Carmen! A mi también me encanta el amor entre distintos (cuanto más mejor). Las palabras a las que me refiero son las que no son necesarias pronunciar. Las que sabes que el otro (u otra) dice sin necesidad de abrir la boca. Tambén eso es parte de la diversidad.
ResponderEliminarEn cuanto a lo de la consolidación, te lo agradezo, pero me parece exagerado. Hay mucho y mucha auténtica poeta por ese mundo bloguero.
Un beso
Hoy lo voy poner en un papel y se lo voy a regalar a mi amor,tu poema expresa todo lo que deseo decirle,citare al autor claro,un abrazo y gracias!
ResponderEliminarPues muchas gracias y espero que le guste. Y te agradezco que cites al autor, aunque no es necesario.
ResponderEliminarBesos
Precioso poema.
ResponderEliminarGracias ARO.
ResponderEliminarsaludos